subordinación y valores

 

A escasos días de las PASO la violencia del oficialismo desgarra cotidianamente el velo de la “revolución de la alegría” que hizo posible el triunfo electoral de Macri en 2015. La campaña electoral basada en mentiras, armado de causas mediático-judiciales e intimidación, ha sido acompañada esta semana por acciones oficiales con fuerte contenido simbólico, reivindicando la militarización de sectores de la población altamente vulnerables y la inserción del país en una geopolítica dominada por un capitalismo global monopólico, que busca mantener la hegemonía del dólar como moneda internacional de reserva y su dominación mundial sobre el petróleo y la tecnología.

Poco tiempo atrás Marcos Peña califico de “vietnamita” a la campaña electoral del gobierno. Es decir, la identificó con una guerra. En esas circunstancias, “todo lo que hagamos se va a definir en los últimos 15 días… hay que jugar un poco a la pelea cuerpo a cuerpo. Cambiar el chip, cambiar la cabeza, esa es la clave” (LPO.com 12 04 2019). Para ello, la campaña electoral asimila rasgos típicos de una propaganda totalitaria y los celulares y el WhatsApp se constituyen en la vía de entrada a la vida cotidiana, para desde allí activar un complejo de odios y prejuicios que tendrá como destinatarios a “los de abajo”.

Estos prejuicios se han enraizado a través de nuestra historia en el antiperonismo de sectores medios y altos de la sociedad, que desde 1955 respaldaron los golpes militares y la sistemática proscripción política del movimiento peronista. Esta situación derivó a mediados de los '70 en el Terrorismo de Estado que, arrasando a las instituciones, reprimió a sangre y fuego todo tipo de disidencia. Luego de la instauración de la democracia en 1983, el antiperonismo pudo votar. Sin embargo, solo accedió al gobierno en diciembre del 2015. Hoy su permanencia en el poder se ve amenazada por un posible triunfo electoral del peronismo. Esta situación lo induce a utilizar todos los medios disponibles para imponer la noción de que el gobierno expresa el pensamiento “de todo el mundo”, mientras que la oposición es expresión de algo único que hay que erradicar para siempre pues es la causante de todos los males del país.

El enemigo es “el populismo de los últimos 70 años”, más precisamente, el peronismo liderado por CFK. Para el oficialismo, si este populismo gana las elecciones, el futuro del país será el despojo y el caos. De ahí que se ataque y estigmatice a CFK, a los sindicatos y a los dirigentes de la oposición sumando a esta gesta a los empresarios mas grandes del país. A través del WhatsApp estos promueven una reforma laboral que tiene por objetivo terminar con derechos adquiridos desde hace mucho tiempo. La campaña oficialista busca además ocultar los errores y falencias del gobierno adjudicándoselos al anterior. Trata de acorralar a la oposición con una batería de mentiras repetidas al infinito siguiendo el principio de que si una mentira (la “maldita herencia”) se repite lo suficiente, por arte de magia se convierte en realidad.

Por otra parte, el gobierno busca reescribir el pasado reivindicando lo actuado durante el Terrorismo de Estado y legitimando el rol político de las Fuerzas Armadas en la vida diaria. En otras oportunidades buscó mitigar la condena de militares juzgados por violación de los derechos humanos y vulneró la ley que impedía la participación de las Fuerzas Armadas en la seguridad interior, autorizándolas por decreto a realizar este tipo de tareas. Ahora reivindica a los carapintadas y ha conformado esta semana el Servicio Cívico Voluntario en Valores que pretende usar a la Gendarmería Nacional para entrenar en el fortalecimiento de los valores democráticos y republicanos a jóvenes “en situación de vulnerabilidad social” (bae.com 16 7 2019). Así, una institución vinculada con la comisión de delitos graves que permanecen impunes y fueron cometidos en el transcurso de la represión de conflictos sociales ocurridos durante este gobierno, una institución que esta vinculada a la desaparición forzosa de personas y al gatillo fácil, se encontrará ahora en control de una iniciativa destinada a la supuesta creación de valores democráticos y republicanos en los barrios y regiones más pobres del país. Mientras tanto, este gobierno ha estigmatizado a la escuela pública, lógico escenario de transmisión de valores republicanos, como el lugar donde “algunos caen” (pagina12.com 21 3 2017) y ha disminuido drásticamente el financiamiento de la educación y de la infraestructura escolar.

En este clima, y a 25 años de impunidad oficial en el juicio por el atentado de la AMIA, el gobierno recibió al Secretario de Estado norteamericano Mike Pompeo en visita oficial, para discutir la cooperación antiterrorista en el continente. Como parte de los agasajos, el gobierno emitió un decreto, confeccionado al gusto del visitante, por el cual se establece el Registro Público de Personas y Entidades Vinculadas a Actos de Terrorismo y su Financiamiento. Próximamente inscribirá en el mismo a Hezbollah, en abierta oposición a la política de Naciones Unidas que no incluye a este partido político libanés en su listado de organizaciones terroristas. Así, décadas después del atentado, este gobierno reproduce por decreto las alianzas políticas de ese entonces y arroja al país a las brasas del conflicto en Medio Oriente, en un rol subordinado a las políticas de los Estados Unidos y de Israel

Por otra parte, esta semana han proliferado los intentos del gobierno por bloquear el avance de la investigación del juez Alejo Ramos Padilla en la causa judicial D'Alessio. Esta causa expone la vinculación de altos funcionarios de los tres poderes del Estado con una mafia paraestatal vinculada al espionaje de servicios de inteligencia locales y del extranjero, a la extorsión y al armado de causas mediático judiciales contra la oposición. El rápido deterioro del Estado de Derecho y la proximidad de las PASO hacen temer por la posibilidad de fraude electoral.

 

 

FMI, violencia económica y elecciones

Este lunes el FMI dio a conocer el documento referido a la revisión del programa económico argentino en el marco del préstamo stand-by por U$S 57.000 millones acordado a la Argentina. Este informe transpira la violencia que el acuerdo descarga sobre la economía argentina con el objetivo de hacer posible la reelección de Macri e imponer un ajuste que conduce hacia una recesión cada vez mas profunda, acompañada de una dolarización encubierta y del endeudamiento ilimitado.

El FMI aprobó un incremento del tope para operaciones con dólares a futuro del BCRA aumentando el poder de fuego de este último para controlar una corrida cambiaria. En el documento, el FMI sostiene que se han cumplido todas las metas propuestas en el contexto del acuerdo stand-by, pero advierte sobre los riesgos electorales y da a conocer un empeoramiento de sus pronósticos sobre la evolución futura de la inflación. Su estimación de la inflación para este año se eleva al 40.2%, desde un cálculo previo del 30,5%. La persistencia de la inflación y la necesidad de recalcularla son consecuencia, según el FMI, del aumento de los salarios nominales y de “un aumento significativo de las expectativas de inflación”. Dado que la inflación es persistente, las tasas de interés reales deberán permanecer más altas durante más tiempo. Como esto afectará a la demanda interna y las importaciones, el FMI se ve obligado a hacer una revisión a la baja del crecimiento esperado en 2020: desde un 2.2% al 1.1%. Así, el FMI admite que la política monetaria no ha podido controlar la inflación y ha afectado negativamente las perspectivas de crecimiento económico futuro. Sin embargo, reitera la aplicación de esta política prolongando la agonía de la recesión. Esto, sin embargo, no es todo.

En efecto, el Informe indica que la capacidad de repago de la deuda por parte de la Argentina sigue siendo adecuada aunque está sujeta ahora a “riesgos mayores”. El principal riesgo surge de la volatilidad financiera asociada a la elección. La incertidumbre electoral puede llevar a una dolarización creciente: es decir a la transferencia de las inversiones en pesos hacia la compra de dólares. Esto “podría crear una brecha de financiamiento presupuestario y profundizar las preocupaciones sobre la liquidez y posiblemente solvencia de la deuda soberana”. Por esta razón, considera “preocupante” que la reciente reducción de los vencimientos haya aumentado las necesidades de financiamiento a corto plazo y exacerbado los riesgos de reinversión en el periodo previo a las elecciones, es decir, en el momento actual. Sin embargo, el FMI no rectifica las políticas monetaria y cambiaria que el acuerdo impone, políticas que han tenido como consecuencia la especulación financiera con las LELIQs, LEBACs, LETES, etc., cuyos vencimientos a corto plazo son precisamente los que esta semana el gobierno ha pateado con dificultad hacia adelante.

El FMI advierte además que a mediano plazo la sostenibilidad de la deuda sigue siendo altamente vulnerable a las crisis, particularmente si se dieran “condiciones sorpresivas de crecimiento negativo”, fenómeno que, sin embargo, el propio Informe admite ocurrirá en  2020, como lo indica su revisión del crecimiento esperado. Sostiene además que es posible que la inflación se mantenga estancada en niveles muy altos o que la recuperación esperada de la actividad económica pueda retrasarse. Esto llevaría a un empeoramiento de los resultados sociales, al aumento de la pobreza y a una erosión del apoyo publico al programa de políticas del gobierno. No obstante lo cual, el Informe reitera la necesidad de mantener y profundizar la política monetaria actual.

Por ultimo el FMI reconoce que la elevada deuda publica, las grandes necesidades de financiamiento derivadas de la reducción en los plazos de vencimiento, el hecho de que una gran proporción de la deuda esté denominada en moneda extranjera y por tanto tenga alta sensibilidad a los movimientos del mercado, la baja relación de las exportaciones en relación con el PIB y un sistema bancario nacional pequeño hacen que aumente la vulnerabilidad de la deuda argentina. A pesar de ello, el FMI evalúa a la deuda “como sostenible pero no con una alta probabilidad” (Argentina: Fourth Review under the stand-by agreement, pp 45 imf.org). Esta frase paradójica sintetiza el esfuerzo que el FMI hace para ocultar la violencia económica de un préstamo que sumergirá muy pronto al país en una tragedia.

 

Irán, petróleo y crisis financiera

Mike Pompeo, secretario de Estado norteamericano pertenece, junto con John Bolton, Secretario de Seguridad Nacional, al ala neoconservadora que ha dominado la política exterior norteamericana en todos los gobiernos que se sucedieron desde la invasión de Irak. Este grupo, estrechamente ligado al gobierno israelí y a sus organismos de inteligencia, impulsa el cambio de régimen (regime change) en el mundo, y es responsable por la sucesión de guerras y países fallidos. Cuando Trump asumió el gobierno y estalló el Rusiagate, los neocons desplazaron a Henry Kissinger que lo asesoraba desde tiempo atrás.

Uno de los objetivos perseguidos por el gobierno de Trump fue impulsar inmediatamente el cambio de régimen en Irán. Esto fue funcional a la estrategia de dominación del petróleo mundial perseguida por Trump para asegurar su proyecto de restituir la grandeza norteamericana perdida (Make America Great Again o MAGA). Así impuso una fuerte presión sobre la economía y las exportaciones petroleras de Irán. Esta política derivo en la ruptura norteamericana en mayo del 2018 del Tratado Nuclear multilateral (JCPOA) firmado durante el gobierno de Obama, a fin de controlar la producción de uranio enriquecido por parte de Irán y evitar que este país adquiriese la bomba atómica.

Saboteado el Tratado Nuclear, los Estados Unidos aumentaron su presión para bloquear las exportaciones de petróleo iraní. Tiempo después, Pompeo daba a conocer sus 12 puntos con demandas totalmente imposibles de aceptar por parte de Irán entre las que se destaca la necesidad de que este país abandone a sus aliados shiitas y se someta a sus adversarios sunnitas (aljazeera.com 21 5 2019). Las presiones culminaron a fines de junio en el derribo de un dron espía norteamericano que volaba a gran altitud sobre territorio iraní acompañado por un avión militar. Irán respetó a este último y esto frenó el bombardeo norteamericano en represalia. Por unas cuantas horas el mundo estuvo al borde del caos.

La verborragia guerrera, tanto de Irán como de Estados Unidos, escaló rápidamente después de este incidente y fue acompañada de atentados contra barcos transportadores de petróleo en el Golfo Pérsico. Estos atentados fueron adjudicados a Irán por el gobierno norteamericano pero su origen fue sospechoso y el gobierno norteamericano no presentó pruebas contundentes. Por ese entonces la tensión había disparado a los precios de los seguros de transporte en la región (zerohedge.com 14 7 2019)) y los precios del petróleo, hasta ese entonces deprimidos por la caída de la producción y el comercio mundial, empezaron a fluctuar alertando sobre la posibilidad de una disparada en caso de acción bélica con una eventual incidencia devastadora sobre la deuda mundial en derivados y sobre el propio sistema financiero internacional.

A principios de este mes, el copamiento británico en Gibraltar de un barco que transportaba petróleo iraní hacia Siria —cuyo petróleo también es bloqueado por los Estados Unidos— desencadenó una ofensiva de Irán para poner fin a la presión económica y militar norteamericana. A las amenazas de volar los recursos petroleros de otros países de la región si era atacado, Irán sumó ahora la notificación de que violaría los limites a la producción de uranio enriquecido estipulados por el Tratado nuclear si los Estados Unidos no levantaban el bloqueo a las exportaciones de petróleo. Hacia principios de este mes, Irán anunció que ya había superado dichos limites (zerohedge.com 3 7 2019). Esto, conjuntamente con el firme apoyo dado por Rusia y China a Irán, llevó a Trump a disminuir la retórica guerrera y a abrir esta semana un nuevo camino de negociación enviando al senador republicano Rand Paul, abiertamente opuesto a las guerras norteamericanas en el mundo, a hablar con el canciller iraní (zerohedge.com 17 7 2019). El jueves el canciller propuso un acuerdo por el cual Irán se comprometía a aceptar formalmente amplias y permanentes inspecciones de su programa nuclear a cambio del levantamiento total y permanente de las sanciones económicas norteamericanas (zerohedge.com 18 7 2019). Mientras esto ocurría, la marina norteamericana anunciaba el hundimiento de un dron iraní en el estrecho de Ormuz. El gobierno iraní desconoció este incidente (zerohedge.com 18 7 2019).

Estas son algunas de las circunstancias que caracterizan al caldero bélico del Medio Oriente en el cual estamos ahora inmersos, gracias a la política exterior del gobierno de Macri. Esto ocurre al mismo tiempo que la debacle financiera del Deutsche Bank, desatada la semana pasada, ha precipitado una fuga de los depósitos de sus principales clientes: los fondos de inversión, al ritmo de mil millones de dólares por día (zerohedge 16.7 2019).

Estos acontecimientos de enorme significado tanto económico como político obligan a la oposición a hacer una discusión profunda sobre las características de la coyuntura internacional y el modo en que la misma podrá potenciar alternativas para salir del laberinto en el que nos encontramos.

 

 

 

 

 

 

 

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