Ni colorados de vergüenza
Santilli en campaña: punitivismo y uso político de la pandemia
Diego Santilli, candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, recorrió distritos de la segunda sección electoral donde gobiernan intendentes PRO. Es en los municipios propios donde puede caer en lugares comunes o esbozar propuestas sin que nadie se ponga colorado. El jueves 12 de agosto en Villa Ramallo, ante la pregunta de un periodista local, adelantó una de sus propuestas: “Quiero que tengamos los diputados para empujar el Código Procesal Penal, para resolver muchos de los problemas delictivos que tenemos en nuestro país. Un Código Procesal Penal que hay que compatibilizar con el Código Procesal de la Provincia, que vamos a trabajar en conjunto, que data de un montón, del año '80, donde no existían delitos como el motochorro o como eh… eh… no había teléfonos celulares en aquella época, con lo cual… Código que requiere ser tipificado, que los jueces no tengan una discrecionalidad a la hora de tomar decisiones, que el Código permite en la actualidad, entonces avanzar con eso” (sic).
En el salón de la Federación Agraria de Ramallo, acompañado por su amigo el ex corredor de automovilismo Juan María Traverso, el intendente Gustavo Perié e integrantes de su lista, “El Colo” Santilli escuchó a algunos vecinos del lugar y vía Zoom a personas de Baradero, Arrecifes y San Pedro. “Lo conozco desde hace muchos años. No está en campaña, simplemente está diciendo lo que piensa”, dijo Traverso en su presentación de Santilli, aclarando que por eso estaba ahí. “Y lo que estamos viviendo –yo por lo menos, y algunos de los que están acá–, un poquito diferente ya lo vivimos y sabemos a dónde se quiere con lo que está sucediendo hoy. Y yo la verdad, otra vez no quiero ir. No voy a ir. Me pasaron de jubilado a descartado. Yo no soy descartado, soy jubilado, sigo laburando”, expresó Traverso, y le agradeció a los pocos presentes.
La campaña del PRO dejó atrás los espontáneos timbreos, puesta en escena a la que recurrieron en las anteriores elecciones donde se filmaba a los candidatos sorprendiendo a alguna vecina o vecino con su presencia. Esta vez, para la campaña de Santilli el armado es otro y se realiza desde la ciudad de Buenos Aires, con alguna ayuda de los intendentes que pertenecen al espacio. Desde la Ciudad, el equipo de Santilli se encarga de los llamados a teléfonos fijos en forma aleatoria. Después de un mensaje grabado de “El Colo”, aparece la voz de una integrante de su campaña que invita a sumarse a la charla con el candidato (por ejemplo, en Ramallo) mientras sondea los intereses del interlocutor y, en forma genérica, lo introduce al clima del desánimo. “¿Cuáles son los temas que le interesa? ¿La inseguridad? ¿Todo lo que está pasando en educación, donde los chicos hace un año y medio no están en las escuelas?”, son las preguntas inducidas para saber si es alguien al que el candidato le puede entrar con su discurso. De ser así, vuelven a llamar para coordinar el lugar donde Santilli estará presente, ofreciendo la alternativa de participar en forma presencial o virtual. Por seguridad, los lugares de encuentro pueden cambiar.
Luego de su presencia en Villa Ramallo se preparó un spot. Lo que no dice Santilli, lo dicen dos vecinas. Una, de familia vinculada con la agroganadería, arroja: “La formación docente está cada vez peor”. Otra, vía Zoom, declama: “Realmente me gustaría ver un futuro para los chicos”. Las imágenes muestran a Santilli tomando nota, dialogando y saludando a los vecinos. Parece ser todo lo que se puede lograr entre la pomposidad de frases vacías y las miserias que se ocultan.
El viernes 13, Santilli recorrió San Nicolás y Pergamino. Esta vez, en tierra donde los Passaglia tienen doble rol. Manuel como intendente de Juntos y Santiago aspira a renovar su banca como diputado por la segunda sección electoral. La recorrida fue reforzada con la presencia del jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, del referente del Peronismo Republicano Miguel Ángel Pichetto, que estuvo en San Nicolás, y de la líder de la Coalición Cívica Elisa Carrió, que se hizo presente en Pergamino. Allí la escenografía resultó acorde a los intereses que representan. En la foto aparecen sentados en unos troncos, entre fardos de alfalfa, con mate en mano, de izquierda a derecha: la diputada nacional por la provincia de Buenos Aires de la Coalición Cívica-ARI, Marcela Campagnoli; Rodríguez Larreta, Carrió, Santilli, el intendente de Pergamino, Javier Martínez y Román Gutiérrez, quien como autoconvocado independiente –de todo lo que sea peronismo– es precandidato a concejal por Juntos, además del dueño del campo que enmarcó la postal. Parados, el precandidato a concejal de Pergamino Ignacio Maiztegui (hijo de Julio Maiztegui, impulsor en la creación de la vacuna contra la fiebre hemorrágica argentina) y la actual concejala y precandidata a diputada María Paula Bustos.
Gutiérrez, productor agrícola, ganadero y comerciante, fue quien realizó un video en abril de este año que lo pinta de cuerpo entero. “Si necesitan recaudar, ¿por qué no echan un poco de asesores, achican el gasto público, dejan de comprar pelotudeces y de mantener vagos? Con eso nos sobraría. Acá se invierte todos los años mucha plata del sector agropecuario, mucha, y eso mueve todos los pueblos y ciudades del interior. Todos los impuestos, las retenciones, no vuelven a los pueblos y ciudades”, espeta allí. Su discurso de antipolítica se acentúa cuando señala que “los millonarios son los políticos”. Pero esos atributos no son los únicos de Gutiérrez, quien demuestra su falta de respeto al principio de autodeterminación de las identidades y orientaciones sexuales en publicaciones de su cuenta de Facebook que, él cree, pueden resultar graciosas.
La recorrida que realizó Santilli junto a Carrió y candidatos locales de Pergamino los llevó a la sede del Club Atlético Douglas Haig, en cuya cancha de básquet se reunieron con los vecinos (porque “El Colo” escucha). Ahí Carrió superó un nuevo récord en su larga trayectoria de disparates, al apuntar: “La señora Cristina Fernández de Kirchner es la autora intelectual y responsable directa de al menos 50.000 muertos en la Argentina. Al hacer el acuerdo con (Vladimir) Putin, impedir la segunda dosis e impedir que vengan las vacunas que ahora, por urgencia, están. De esa responsabilidad moral, de ese delito moral de lesa humanidad, no va a salvarse nunca”. Y demostrando un acto de republicanismo de juego limpio dijo: “No voy yo a firmar un juicio político en campaña, pero no se preocupen, que estoy acompañando a las mujeres que están haciendo esta causa para determinar quién impidió que lleguen otras vacunas, porque yo no hago juicio político en campaña”, reiteró, dejando claro que no participa, pero acompaña. La idea de que “si no te puedo vencer por los votos intento desde la vía judicial”, sigue siendo la utilizada para frenar el crecimiento que el Frente de Todos tiene cada vez que habla Cristina.
Entre sus propuestas, Santilli propone discutir en el Congreso para que en “la Argentina tengamos Ley de Ficha Limpia”. No brinda mayores detalles de quiénes serían los encargados de elaborarla, o quiénes se considerarían con “ficha limpia” para, como arguye, “ponerle fin a los corruptos en la política”. El candidato propone como si su espacio político no hubiera endeudado y ajustado, realizado negocios para ellos mismos, su familia y los amigos y cooptndo mediante presiones al Poder Judicial , como ariete en la persecución de opositores con armado de causas y detenciones preventivas.
Esa idea de que ellos son “El Bien” y todos lo demás son “El Mal”, vuelve una y otra vez en sus propuestas. Creen que la pandemia pudo crear algún tipo de amnesia en la población. Por eso, casi negando los cuatro años que gobernaron, se presentan con naturalidad como si el cambio de domicilio de unos y otros anulara su responsabilidad pasada. Así, “El Colo” propone en materia de seguridad: “Vamos a defender a los ciudadanos y a las víctimas, no a los delincuentes”, instaurando ellos quiénes son unos y quiénes son los otros, quiénes son ciudadanos y quiénes no. Así también lo hicieron mientras gobernaron con el Poder Judicial, que se demoraba por esta cuestión absurda de la presunción de inocencia que buscaron barrer. Porque ellos son “La República”, y por eso, sólo su palabra y sus decisiones pueden determinar quiénes son los que tienen la “ficha limpia” para ser parte de la política y quiénes son ciudadanos. De esa manera, con su mera presencia, los otros poderes pueden funcionar, pero siempre bajo su mando. Las próximas elecciones serán importantes para saber de cuánta memoria goza el pueblo para no volver a caer en la trampa.