Más que una estatua

 

La Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) fue el punto de coincidencia política donde los Presidentes de gobiernos populares —electos en la primera década del 2000— se constituyeron en búsqueda de una identidad y ciudadanía suramericana para desarrollar un espacio regional integrado. Sin embargo el espacio de referencia, las aspiraciones y los objetivos integracionistas de aquellos años que se plasmaron en el Tratado Constitutivo de Brasilia en 2008, quedaron truncos con la llegada de los gobiernos neoliberales de Iván Duque en Colombia, Mauricio Macri en Argentina, Sebastián Piñera en Chile y Jair Bolsonaro en Brasil. En este camino, entre el 2018 y 2019, seis de los doce Estados miembros anunciaron sus salidas del organismo. El gobierno de Alberto Fernández es un punto de partida fundamental para la reconstrucción de la integración sudamericana.

El año pasado, una nota de la Cancillería a cargo de Jorge Faurie denunció el tratado constitutivo de la UNASUR. Según el comunicado de prensa, la decisión fue tomada en el “marco de la crisis que aqueja a ese organismo, manifestada en la acefalía de la Secretaría General por más de dos años, así como una agenda con alto contenido ideológico y muy alejada de sus objetivos iniciales y el desorden administrativo”. Resulta curioso que un año anterior a que se efectuara esta comunicación, la presidencia Pro-Tempore de la UNASUR estuvo en manos de la Argentina. Durante ese período no se convocaron a reuniones, la vacante en el cargo del Secretario General no se solucionó, ni tampoco se tomaron medidas tendientes a la reactivación del organismo.

La decisión del gobierno de Macri había generado diversas críticas vinculadas a la legalidad y formalidad de ese acto. Jorge Taiana, Senador Nacional y Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, dijo: “Argentina sigue siendo parte de UNASUR porque el retiro nunca pasó por el Congreso. Nosotros ratificamos por ley el ingreso y la participación en el organismo, pero nunca hubo una ley que lo anulara”. Algunos países por legislación no deben pasar por el Congreso, pero Argentina sí. En este sentido Taiana agregó que “el macrismo ha hecho una cuestión apartada de la ley” y que la interpretación de Macri sobre que se podía salir del tratado simplemente con una carta es de “muy dudosa validez legal internacional”.

Chile, Paraguay, Brasil, Perú y Colombia abandonaron en el mismo momento la UNASUR. Tiempo después Ecuador también se retiró. Eso implicó que el edificio diseñado para su sede, por el arquitecto Diego Guayasamin, dejó de cumplir funciones. La construcción había sido inaugurada en 2014 en un acto al que asistieron Cristina Fernández de Kirchner, Rafael Correa, Dilma Rousseff, Juan Manuel Santos, Horacio Cartés, Evo Morales, Nicolás Maduro, Sam Hinds, Desi Bouterse y Ernesto Samper, entre otras autoridades.

 

 

 

 

Los mandatarios unidos en la entrada del edificio, rodeados de trabajadores, niños e inmigrantes, habían descubierto allí la estatua de Néstor Kirchner, ex Presidente y primer Secretario General del organismo regional. El acto estuvo acompañado por un coro de niños y niñas ecuatorianos de no más de diez años, que cantaron a coro y se preguntaban: "¿Cómo será la patria que construimos?" 

Ernesto Samper, ex Presidente de Colombia y último Secretario General de UNASUR, recuerda a la sede como el lugar “más emblemático de Ecuador”. Y describe que allí se contaba con un centro de documentación digital sobre la historia de la integración, una biblioteca para niños que llevaba el nombre de García Márquez, un salón de Cancilleres y ocho aulas múltiples. “UNASUR formaba parte de la revolución de la autoestima que consiguió el gobierno de Rafael Correa”, cuenta.

 

 

 

 

La crisis de la UNASUR puede leerse como el resultado del ascenso de gobiernos de derecha en América Latina. “Todo esto se vino abajo con el cambio de gobierno. Hoy la sede está convertida en una bodega que simboliza lo que importa la integración para los mandatarios que hoy nos gobiernan” expresó Samper. A la vez celebró que el gobierno de Alberto Fernández traslade la estatua de Nestor Kirchner y los archivos que desde el cierre se mantuvieron guardados. “Son la semilla de la resurrección de UNASUR”, puntualizó.

Matías Capeluto, Director de la Casa Patria Grande Presidente Néstor C. Kirchner, es el artífice del plan que se encarga de rescatar los bienes y el patrimonio del organismo para que arriben a la Argentina. El mes pasado el Canciller Felipe Solá ofreció formalmente la voluntad de ofrecer al país para la custodia y preservación del patrimonio de UNASUR. Entre ellos se encontraba la escultura del ex Presidente argentino. 

“Fue un trámite burocrático que llevó más de un año, pero ya llegó hace dos semanas al país y la estamos poniendo en condiciones”, manifestó Alberto Fernández en una entrevista que brindó a El Destape Radio. El resto de los elementos (bienes culturales, muebles, archivo papel y servidores informáticos) están próximos a viajar de Ecuador a Ezeiza para que sean recibidos en la Casa Patria Grande —ubicada en Carlos Pellegrini y Juncal— que actualmente está en obra.

 

 

 

 

Cuando aterrizó el avión que traía el monumento, el mismo fue directamente depositado en el taller donde trabaja su creador Miguel Gerónimo Villalba. Desde los primeros días de octubre, los trabajos de restauración están siendo realizados para que cuando se cumplan diez años del aniversario de la muerte de Néstor Kirchner, la obra sea ubicada en el Centro Cultural Kirchner. Fuentes del Ministerio de Cultura comentaron que no se emplazará en el exterior del CCK sino en el interior. Al cierre de esta nota, las características del acto aún no están definidas. 

El mismo día se realizarán dos movilizaciones. A las 14hs la CTA convoca en tres puntos de la ciudad una caravana de vehículos para "conmemorar un año del gobierno popular y los diez años que llevamos a Néstor en el corazón". Y a las 18hs se realizará en Plaza de Mayo la Caravana de las Mil Flores "Sin descender de los vehículos: Toca bocina, canta por Néstor, con banderas o carteles. Usa tu remera favorita. Manteniendo las medidas de protección , barbijo, distanciamiento, cuidandonos entre todxs!" dice el mensaje que invita al homenaje.

Consultado por El Cohete a la Luna, Taiana reflexiona que “hay un aire fresco en América del Sur y la idea de que esa restauración conservadora había venido para quedarse para siempre, es una idea equivocada. América del Sur sigue siendo un territorio en disputa”. El triunfo del MAS en Bolivia, el plebiscito en Chile, las elecciones municipales en Brasil y las elecciones parlamentarias en Venezuela y presidenciales en Ecuador, son el escenario propicio para que la reconstrucción de la Unasur retome los cimientos de la integración regional que los gobiernos neoliberales desarticularon. 

En concordancia, Samper opinó: “Creo que el péndulo de la historia está regresando al progresismo. Así lo demuestran las elecciones en Argentina, México y ahora Bolivia. La visión de la integración que tenemos en el Grupo de Puebla, del cual es honroso miembro fundador Alberto Fernández, es muy distinta a la del autodenominado Grupo de Lima o Prosur, mejor dicho Pronorte”.

 

 

 

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