Fiel al mejor estilo kirchnerista, la noticia se guardó bajo siete llaves. La sorpresa fue unánime. Casi que ni sus compañeros y compañeras del gabinete de la provincia de Buenos Aires lo sabían. El jueves a las 11 de la mañana se oficializó: Fernanda Raverta se convirtió en la flamante titular del ANSES luego de la no tan sorpresiva salida de Alejandro Vanoli que venía acumulando malestar con el Ejecutivo. “Recibí en Olivos a @FerRaverta, nueva directora ejecutiva de la @ansesgob. En el marco de la pandemia, el organismo tiene una función clave a la hora de brindar asistencia económica a los sectores más vulnerables. Confío en su capacidad para afrontar ese enorme trabajo”, tuiteó el presidente Alberto Fernández. “Enorme orgullo y gran responsabilidad. Voy a dar todo de mí. Gracias por la confianza”, le respondió la flamante mandataria. La designación de esta política marplatense en medio de la pandemia es también una noticia que impacta entre los feminismos, en particular, en la demanda por la participación política de las mujeres, lesbianas, travestis y trans. Y sobre todo, después de que el macrismo quiso acabar con las llamadas jubilaciones de amas de casa, medida que pudo frenarse gracias a la lucha en las calles. En 28 años de historia, por primera vez, una mujer va a manejar una de las arcas más trascendentales de la política. Y es una mujer que se considera feminista. Se sabe: el Anses es una de las cajas más grandes del Estado y una de las áreas más sensibles. Fernanda va a manejar, ni más ni menos que la famosa “plata de los jubiladxs”.
De acuerdo a un estudio del Observatorio de las Elites realizado por el Centro de Innovación de los Trabajadores (CITRA) que puso el foco en el género en el poder, las mujeres ocupan el 37,5 por ciento del total de los cargos más altos del gobierno de Alberto Fernández. Mientras que en la gestión anterior representaban un 23,1 por ciento. Se trata de un dato alentador. Sin embargo, la participación política de ellas no es igual en todos los ministerios. Hay tres carteras que no tienen mujeres en sus cúpulas: la de Obras Públicas, la de Transporte y la de Trabajo. ANSES depende del Ministerio de Trabajo, uno de los peores rankeados en cuanto a paridad política. La designación de Fernanda Raverta abre paso a una transformación en espacios hiper masculinizados vinculados a la distribución de, nada más y nada menos, la plata. Junto a Luana Volnovich —titular del PAMI— hoy hay dos feministas en los máximos cargos referidos a lxs jubiladxs. Los desafíos de los feminismos en el Estado se multiplican.
“Hace rato que Alberto Fernández viene señalando a Fernanda como una figura femenina a tener en cuenta que merece una gran oportunidad. Es una decisión bien de marca Fernández. En este contexto hacer mover el ANSES es un desafío extraordinario pero ella tiene mucha capacidad de gestión”, dice a LATFEM la socióloga, investigadora del CONICET y directora del CITRA, Paula Canelo. “Poner a las mujeres en espacios de toma de decisión tiene es una voluntad política”, agrega.
La trayectoria política de Raverta data desde hace muchísimos años, incluso se podría decir desde antes de nacer. Su biografía está marcada por la política pero su figura se hizo conocida recién durante la campaña electoral del año pasado. Ella fue la candidata del Frente de Todxs en Mar del Plata. La ciudad balnearia fue el escenario elegido por la fórmula Fernández-Fernández para cerrar la campaña a nivel nacional. Raverta hizo emocionar con su discurso al entonces candidato a presidente, Alberto Fernández, que no ocultó sus lágrimas cuando al finalizar su discurso dijo: “El 27 de octubre le rendimos un homenaje a Néstor”. Desde ese momento el nombre de esta marplantense que ocupaba una banca como diputada nacional desde el 2015 llegó a los principales portales. Incluso, mucha de la militancia peronista y feminista también se sorprendió esa tarde con el discurso. Raverta pasó a ser una referenta para muchas, que tras la derrota en su ciudad se convirtió en ministra de Desarrollo de la Comunidad del gobierno de Axel Kicillof.
Se formó como Licenciada en Servicio Social por la Universidad Nacional de Mar del Plata, una profesión hiper feminizada. En su trayectoria recorrió un doble camino. Por un lado, en la función pública se desempeñó en áreas vinculadas a la niñez, la adolescencia y el área de desarrollo social, hasta llegar a ser ministra de esa cartera en la provincia más poblada del país. Y por el sendero de la política partidaria supo hacerse lugar en un terreno de barones: fue secretaria adjunta del Consejo provincial del Partido Justicialista (PJ) y hoy es congresal nacional de esa fuerza política.
Su vínculo anterior con la ANSES fue como jefa de la Unidad De Atención Integral (UDAI) de ese organismo en el Puerto Mar del Plata en 2010. Como diputada bonaerense, entre 2011 y 2015, fue presidenta de las comisiones de Cultura y de Derechos Humanos. En 2017 Raverta escribió el proyecto de ley sobre trombofilia, que busca garantizar el diagnóstico precoz y el tratamiento necesario para lograr un embarazo a término.
En diálogo con LATFEM, Adriana Donzelli, secretaria adjunta de la CGT de Mar del Plata que la conoce bien, comenta que Raverta “siempre mantuvo el mismo perfil de cercanía con la gente. Ella es muy accesible, tiene una escucha atenta, la respuesta a las necesidades y un amplio conocimiento de la problemática social. Tiene una capacidad muy grande para construir territorialmente organización y creo que es justamente por eso su designación al frente del Anses. Fernanda fue clave porque a partir del 2015, en el peor momento, cuando habíamos perdido ella logró generar un espacio donde unificó a todos los espacios del campo nacional y popular. Y la verdad que con reuniones sistemáticas, con espacios para la participación se logró una elección histórica que si bien no se ganó, estuvo a muy poquitos puntos de tener la intendencia y quedó consolidado un espacio muy representativo. Todos los fines de semana, absolutamente todos, tenía programados encuentros y reuniones, sea con vecinos, con un grupo de estudiantes, con grupos de trabajadoras, con grupos de mujeres de los barrios. Tiene que ver con alguien que gobierna conociendo a la gente”.
Estela Díaz, ministra de Mujeres, Políticas de género y Diversidad sexual de Buenos Aires compartió cuatro meses de gestión con ella. “Es una persona equilibrada, con criterio propio, muy cálida a la vez, muy firme en sus convicciones y en sus posicionamientos, y con enorme capacidad de trabajo y de diálogos plurales”, dice a LATFEM. “La voy a extrañar porque teníamos diálogos y comunicaciones por los temas que se cruzaban comúnmente, pero ella es la que te mandaba un mensajito por si no fuiste a una reunión para preguntarte cómo estabas, si había pasado algo. Genera vínculos muy humanos más allá de lo político. Está atenta a tu vida personal siempre. Es una alegría enorme que sea mujer y que sea ella la que eligió a Alberto para poner en el Anses en un lugar tan, tan sensible y tan importante para la política en el país y para el Estado”, agrega la funcionaria.
De Cuba al mundo
Nació en Buenos Aires el 25 de noviembre de 1976 en plena dictadura cívico-militar y cuando esa jornada no era, todavía, una fecha del calendario feminista. Su madre fue María Inés Raverta, integrante del movimiento Montoneros, secuestrada y desaparecida por oficiales del Ejército Argentino en la capital de Perú, en el marco de lo que se denominó Plan Cóndor. Tenía 24 años de edad, en 1980, cuando la desaparecieron. Su padre es el ex dirigente montonero Mario Montoto, quien fue secretario de Mario Firmenich, y padrino de su hija María Inés Firmenich. Montoto es actualmente propietario de Codesur, una empresa dedicada a la provisión de servicios de vigilancia y productos bélicos a fuerzas y cuerpos de seguridad.
Raverta entre 1980 y 1982 estuvo en Cuba junto a otros hijos e hijas de integrantes del movimiento Montoneros, participando de lo que luego se llamó la guardería montonera. La historia personal de Fernanda Raverta, como la de muchos y muchas hijxs de militantes políticos, avanzó al ritmo de la historia política argentina.
Su infancia fue retratada en el documental La guardería. “Todos los juegos tenían un trasfondo de lo que nos pasaba—recuerda Raverta en la película—, jugábamos a ser como nuestros papás, a ser militantes. Y ser militantes para nosotros era ser parte de una organización. Hacíamos juegos de armar documentos de cómo nos teníamos que comportar entre nosotros. Ser buenos amigos, ser buenos hermanos, ser solidarios”.
En 1995 ella fue una de las fundadoras H.I.J.O.S. Regional Mar del Plata. Como a muchos y muchas jóvenes, el proyecto político que inauguró Néstor Kirchner en el año 2003 la atrajo como un imán. Su carrera política comenzó con cargos y asesorías en el gobierno local hasta conseguir una banca en la legislatura provincial y luego nacional. Raverta hoy tiene dos hijas con su compañero Pablo Obeid, que hace poco se convirtió el director de ANSES Mar del Plata. A partir de hoy Fernanda Raverta será su jefa.
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