La madre de todas las grietas

El CEO y Director de USAGM, John F. Lansing, ordenó la revisión en octubre de 2018 debido a un segmento de video transmitido en mayo de ese año en Radio Televisión Martí que incluía comentarios antisemitas sobre el filántropo George Soros.

Según El Nuevo Herald, el segmento “reproduce teorías conspirativas sobre Soros, quien es identificado como ‘judío multimillonario’ y ‘judío de moral flexible’”.

El periódico agregó que el informe ganó atención en octubre después de que un blog lo destacó luego de las amenazas de bomba contra Soros.

Ese mes Lansing emitió un comunicado diciendo que el segmento era “inconsistente con nuestros standards profesionales y ética. El contenido de USAGM Networks está obligado a cumplir con los más altos standards de periodismo profesional”.

También dijo que ordenó una auditoría al contenido de la OCB así como capacitación adicional para sus periodistas.

Ocho empleados federales y contratistas de Radio Televisión Martí fueron despedidos a raíz del incidente, según Tomás Regalado, director de la OCB desde junio de 2018.

Como parte del informe publicado recientemente, cinco expertos evaluaron una muestra aleatoria de noticias y contenido de opinión de la OCB que se publicó entre el 1° de marzo y el 30 de noviembre de 2018. Mientras que el panel dijo unánimemente que los deportes, las artes y el contenido ligero, así como los resúmenes de noticias en línea, estaban bien, encontraron problemas con los programas de radio y televisión.

Con respecto a la calidad de la producción de radio y televisión Martí, los expertos dijeron que era “mediocre”.

Al observar el equilibrio y la imparcialidad, los expertos encontraron que los puntos de vista opuestos se omitían con frecuencia y los anfitriones y los periodistas proporcionaban opiniones y editorializaban sin que el contenido se presentara claramente como tal.

Además, “en Martí parece estar permitida casi cualquier crítica al gobierno cubano y a sus líderes en la radio, la televisión y en internet a diario, en los comentarios de las noticias, en los programas y en los informes en línea a lo largo del día”, según la evaluación experta.

El panel pidió fuentes con diferentes puntos de vista y más atribución de contenido. También encontró una falta de contexto para explicar los eventos de las primeras etapas de la revolución cubana o los problemas contemporáneos, especialmente fuera del lente anticastrista.

Como aspectos positivos, el panel dijo que encontró “pocos errores de hecho” en las noticias y “casi ningún uso de fuentes anónimas”.

El panel analizó dos preguntas de larga data que afectan a la USAGM, una es sobre “si debe producir propaganda” y la segunda es sobre si la agencia y sus medios “deben ser un instrumento directo controlado por la Secretaría de Estado para ejecutar la política exterior de cada una de las administraciones”. Como fue señalado, las administraciones y el Congreso desde al menos el presidente Dwight Eisenhower (1953-1961) han dicho que no a ambas preguntas.

“En su lugar, encargaron a la agencia que reflejara los ideales estadounidenses de una prensa libre, objetiva e imparcial, y que de ese modo tratara de influir en las poblaciones extranjeras demostrando cómo funciona una democracia, aun con todas sus imperfecciones”, afirmó el panel.

A pesar de reconocer que existe una “tensión inherente” en la misión de la USAGM, ya que es parte del gobierno federal, los expertos encontraron una diferencia en gran parte del contenido de Martí en comparación con otros servicios de noticias de la USAGM.

“Martí se dedica abiertamente tanto a la propaganda como a la promoción de la política exterior de la administración actual, en este caso hacia Cuba (así como hacia Venezuela y Nicaragua)”, señaló el informe.

El panel encontró que los intentos de llevar a cabo la estrategia anterior para influir en un cambio de régimen en Cuba fueron “desacertados” y “casi seguro que fracasarán”.

Más tarde, los expertos explicaron que la Cuba de hoy “parece estar lista para el cambio”, pero “el contenido de Martí es fundamentalmente inadecuado para promover una transición hacia la democracia”. Para respaldar las afirmaciones, dijeron que el contenido de Martí no aborda la realidad cubana actual y que sus programas de entrevistas unilaterales no tienen la capacidad de cambiar de opinión. Y al simplemente atacar, no promueven la democracia.

El presidente del panel de expertos fue Edward Schumacher-Matos, director del Centro Edward R. Murrow para un Mundo Digital en la Escuela de Derecho y Diplomacia Fletcher de la Universidad de Tuft. Otros miembros del panel incluyeron a Andrea Sarralde, colaboradora y ex reportera de Telemundo; Laura Castañeda, profesora de práctica en la Escuela de Periodismo y Comunicación Annenberg de la Universidad del Southern California; María Fernanda Sandoval, experta en marketing y redes sociales; y Roberto Suro, fundador y ex director del Pew Hispanic Center.

Radio Martí fue creada en 1985 y TV Martí fue luego en 1990. Con sede en Miami, Florida, Radio Televisión Martí consigue información de la isla a través del teléfono, correos electrónicos, redes sociales y líneas de denuncia de derechos humanos. Como lo explicó Regalado al Centro Knight, después de que las personas denuncian violaciones de derechos humanos, intentan confirmar la información y luego enviarla a Freedom House en Washington, D.C.

El presupuesto de la OCB para 2018 era de U$D 29 millones. Sin embargo, la solicitud de presupuesto para el año fiscal 2020 de la USAGM incluyó solo U$D 12.9 millones para la OCB.

El gobierno cubano bloquea la señal de televisión en la isla y un avión que solía llevar la señal mientras volaba sobre la isla se suspendió en 2014, según The Guardian.

No obstante, según una encuesta de 2017 encargada por la Junta de Gobernadores de Transmisiones de Estados Unidos –precursora de la USAGM– uno de cada diez adultos cubanos encuestados (1.478 personas) dijo que usó contenido de Martí la semana anterior. La encuesta, cuyo resumen fue entregado al Centro Knight por la USAGM, entonces estima que aproximadamente 1 millón de adultos accedieron al contenido de Martí a través de radio, televisión satelital, en línea y a través de “paquetes”, unidades flash o DVD cargados con contenido informativo y de entretenimiento, durante ese periodo de tiempo.

Según el CEO Lansing, se formó un grupo de trabajo conjunto de USAGM-OCB para abordar las recomendaciones de la reciente revisión de los expertos y analizará cinco áreas que incluyen cosas como “actualizar los estándares periodísticos” y “producir información relevante; un periodismo comprometido y equilibrado consistente con el mandato legislativo”.

Otra reforma incluye la contratación de un Editor de Estándares y Mejores Prácticas, que Regalado dijo que comenzará en la posición a principios de julio.

Como escribió Lansing, los empleados también recibirán capacitación en equidad, objetividad, equilibrio y sesgo en la cobertura. Regalado trajo a alguien de la Liga Antidifamación para hablar con los empleados en la oficina de Miami.

Respecto al futuro, Regalado, un ex periodista de radio y televisión y ex alcalde de Miami, habla sobre un cambio en la cultura.

“Ser un empleado federal te garantiza un aislamiento total de las personas que observan lo que haces y cómo lo haces, de la supervisión, la responsabilidad, y hemos demostrado con esta investigación y su resultado que si las personas actúan de manera no profesional, incluso si son empleados federales, pueden ser despedidos”, explicó Regalado.

El futuro también implica ser “la principal fuente de noticias sobre Cuba en el mundo”, dijo.

La agencia se apartó de su misión en el pasado, explicó, y ahora es responsable de implementar las reformas a la OCB.

“Creo que la gente de Cuba se lo merece”, dijo Regalado.

Señaló los artículos que cubren la auditoría independiente que fueron incluidos en las transmisiones de Radio Televisión Martí y sus sitios digitales después del lanzamiento del informe.

“Si queremos transparencia para el pueblo de Cuba, debemos ser transparentes”, dijo.