Deudas sin saldar
El gobierno ve precipitarse su salida y el mundo sindical reacciona ante la fórmula Fernández-Fernández
La confirmación de la fórmula Fernández-Fernández (Alberto y Cristina) sacudió el escenario de la política y sus ondas expansivas impactaron en el mundo sindical. La puesta en órbita de las fórmulas presidenciales de Fernández y Roberto Lavagna (con terceros en discordia como Sergio Massa dando vueltas en su sistema), sacó de su eje a varios dirigentes sindicales, preocupados por mostrar su juego de lealtades en la partida rumbo a la nueva época. La transición no concede nada de tiempo para la precipitada salida de un gobierno en fuga de sus propios fracasos, y no siempre contempla las propuestas en política y economía de cualquiera sea el “proyecto” a futuro.
Hugo Moyano (camioneros, SiChoCa) aseguró que fue “un gesto de humildad y de grandeza por parte de Cristina” y consideró que sería “importantísima” una convocatoria al líder del Frente Renovador, Sergio Massa. Tanto el camionero como Héctor Daer (sanidad, ATSA, y co-secretario de la CGT), que venían de saludarse a menudo en la Comisión de Acción Política del PJ, se mostraron conformes. Al frente de uno de los gremios que más sufrió el industricidio macrista, Ricardo Pignanelli (mecánicos, SMATA), tal vez haya sentido alivio, con un altísimo porcentaje de su gremio suspendido o echado de su trabajo. Entusiasmos más fervientes provinieron de la CTA de los Trabajadores a través del diputado Hugo Yasky y de Roberto Baradel (docentes, SUTEBA). La Corriente Federal de Trabajadores se expresó con firmeza por boca del radical Sergio Palazzo durante un acto en el estadio de Ferro y de varios referentes.
La carrera política que se desató con el mensaje de la ex Presidenta convocando a la “unidad del campo popular lo más amplia posible, para derrotar a Mauricio Macri y asumir la difícil tarea de reconstruir nuestro maltratado país”, también desacomoda a los dirigentes que ven en la coyuntura la posibilidad de eludir la dura realidad del presente. Usan el discurso del cómo votar en octubre para esquivar y diluir el reclamo de las bases. Sindicalistas siempre cercanos a la negociación y a todos los gobiernos se juntaron para sacarse la foto en otras escuálidas largadas presidenciales: Andrés Rodríguez (estatales, UPCN), Gerardo Martínez (construcción, UOCRA) y el armador estrella de la derecha peronista y declarado enemigo de ambos Fernández, Luis Barrionuevo (gastronómicos, UTHGRA) asistieron a la puesta en valor de “consenso 19” Lavagna. Gremialistas “gordos”, amigos de todos los oficialismos como Armando Cavalieri (comercio, SEC) y José Luis Lingeri (Obras Sanitarias, Sgbatos) entre otros, están a la espera de encuestas más ajustadas para definirse. Una fría ausencia de gremialistas y gobernadores acompañó a la devaluada reunión de Alternativa Federal.
El paro general convocado para el 29 por la conducción de la CGT logró el respaldo del denominado “triunvirato de San Cayetano” integrado por la CTEP, la CCC y Barrios de Pie para la medida, con ollas populares en los barrios. Tras la adhesión proclamada por los movimientos sociales y ambas CTA, se conoció la participación activa del Frente Sindical para el Proyecto Nacional y la presencia de Hugo Moyano y las principales referencias de ese espacio en la ciudad de Córdoba, más la realización de centenares de ollas populares en todo el país. Hugo Yasky será de la partida junto a otros dirigentes nacionales de la CTA. La CGT Regional Córdoba anticipó su adhesión total a la huelga del 29. Un día antes se conmemorará el aniversario con una serie de variadas actividades. Cincuenta años más tarde los dirigentes que eligen la confrontación contra el modelo económico reinante se dan cita en el mismo escenario callejero donde se dio aquel Cordobazo que, junto al Rosariazo, certificaron la muerte del Onganiato. La CGT nacional había convocado un paro nacional para el 30 de mayo para forzar el restablecimiento de las paritarias suspendidas desde 1967. Pocos recuerdan que las quitas zonales y el sábado inglés eran pequeñas reivindicaciones que se estaban debatiendo cuando la locura represiva del dictador se cobró la vida de Juan José Cabral, tras una protesta en Corrientes por el aumento de los tickets en el comedor universitario y pocos días después la del estudiante Adolfo Bello en Rosario, luego de un acto relámpago de protesta contra aquel asesinato. En la marcha de protesta (el primer Rosariazo) mataron al pibe de 15 años Luis Norberto Blanco y durante el Cordobazo la represión se llevó la vida del obrero de la Kaiser, Máximo Mena. La represión y la muerte eran la “razón de Estado” que reafirmaba el plan económico liderado por el liberal Adalbert Krieger Vasena.
Contra un gobierno elegido por el voto popular y un modelo económico preñado de similar liberalismo, el sindicalismo se debate nuevamente entre el colaboracionismo y la confrontación. El movimiento obrero organizado, con su mochila de contradicciones a la espalda, sigue estando en el centro de la escena para preocupación de las mismas clases dominantes que desde el comienzo de esta historia se enroscan sobre su odio sin que puedan sortear su existencia. Hace 50 años en las calles de Córdoba y Rosario; desde hace 100 años en los talleres Vasena de la Semana Trágica, en la Patagonia Rebelde y en la Forestal de Quebracho del norte de Santa Fe. Poco importan los motivos que originan los enfrentamientos, como la sanción a un ferroviario en Rosario o la represión a los obreros de Kaiser tras la asamblea en el Córdoba Sport. Lo que permanece es que la práctica sistemática de la represión a los reclamos encuentra en las puebladas insurreccionales su manera de rebelarse.
Los vientos de unidad que soplaron en Regionales del interior como Rosario y Santa Fe llevaron a una treintena de organizaciones sindicales de La Plata, Berisso, Ensenada, Brandsen, Punta Indio y Magdalena a realizar el Primer Congreso de trabajadoras y trabajadores de La Plata. Los platenses se entusiasman con el objetivo de conformar una plataforma de acción programática que permita a los trabajadores revertir las medidas de empobrecimiento generadas con la premisa de unidad del movimiento obrero. El plenario sesionó junto a dirigentes y delegados de cada organización y un acto de cierre donde estuvo presente todo el arco político regional. El Frente Gremial está compuesto por docentes universitarios de La Plata (Adulp), Telefónicos, Asociación Bancaria, ATULP, AGC, Ceramistas, Curtidores, Químicos, Guincheros, La Fraternidad, Luz y Fuerza, Maquinistas, Secasfpi, Sef, Stigas, Supeh Ensenada, SUPeH Flota, Suteba La Plata, Suteba Berisso, Sadem, Aber (Hipódromo), Sitrapren, UPSRA, APSEE, Udocba Berisso, Unión Ferroviaria y Ladrilleros.
La UOM firmó una paritaria con cláusula de revisión para el mes de noviembre o cuando la inflación supere el 27. Teniendo en cuenta los 8 puntos de recuperación del año anterior, el acuerdo pone un horizonte de 2019 de un 28% asegurado, sin cláusulas gatillo y con amenaza inflacionaria más allá del 40%. Aún falta la discusión con la Cámara de Industriales Siderúrgicos (CIS), una entidad poco permeable desde que la voz cantante la tiene al abogado personal de Paolo Rocca, Julio Caballero, un experimentado quitasueños de los paritarios siderúrgicos. En ese marco, Antonio Caló justificó con demasiada cautela: “Perdí 50.000 trabajadores desde 2015”. El 28% es el porcentaje ordenado por el gobierno a través de Dante Sica, quien tras su amable visita al edificio de Azopardo de la CGT consiguió la apresurada firma de varios convenios. Trascartón declaró que son dos millones los trabajadores conveniados que recibirán un aumento del 28% este año. Los dirigentes menos predispuestos a la pelea se apuran a firmar sus paritarias para quitarle dramatismo y entidad al paro del 29. Barrionuevo lo obtuvo en tres cuotas, la última para marzo de 2020. Igual porcentaje están firmando pasteleros, estacioneros y los estatales de UPCN, con el clavo en el zapato de la resistencia de ATE, que impugna y se niega a firmar las minicuotas hasta marzo. El bajísimo techo del 28 separa la caída salarial del difícil cielo proletario de llegar a fin de mes. El porcentaje, obviamente, patea el problema de equiparar inflación con sueldos dignos para el gobierno que viene.
Frente a un gobierno golpeado por la realidad y jaqueado por la protesta social, que ya no tiene margen para ofrecer nada a futuro, la contundencia esperada de la medida de fuerza reabrirá el debate interno de cara a la unidad del sindicalismo alrededor de la protesta. Según datos difundidos por el INDEC, la actividad económica se desplomó un 6,8% en marzo respecto al mismo mes del año anterior. La espantosa crisis se profundiza. Diario Popular anunció que no va a saldar su deuda con los trabajadores hasta que no salga su concurso de acreedores (que ni siquiera fue presentado aún) y sus empleados no cobran paritarias ni francos y sufren arbitrarios recortes en sus sueldos. Página/12 no se publicó en el marco de los paros sorpresa de su personal por el incumplimiento de pagos atrasados desde 2017. Desde octubre pasado paga apenas sumas “a cuenta”, amparándose en que Trabajo no “homologó” la paritaria 2018. Empresas como la alimentaria Alijor maniobran con despidos y reincorporaciones a discreción a 250 trabajadores para realizar despidos selectivos e imponer nuevas condiciones de trabajo. Producto de ese manoseo y durante el cierre de la planta falleció de un ataque al corazón el compañero Claudio Soto, de 54 años. Los trabajadores de Casinos estatales defienden sus puestos de trabajo y realizaron marchas y protestas contra la timba online y los bingos de Angelici que viene habilitando la gobernadora Vidal con total hipocresía. Esa misma actitud quedó al desnudo con una nueva explosión, esta vez en la secundaria 27 del barrio La Esperanza, en Moreno. Un auxiliar prendía una estufa y explotó. Afortunadamente y de casualidad no murió nadie esta vez, pero María Eugenia acumula deudas sin saldar con la sociedad. Cuando se cumplen 31 años de la Marcha Blanca, vaya un elogio de esta columna a los docentes de Entre Ríos, que pararon las fumigaciones con su lucha: “Una bandera que llevamos los docentes de todo el país”, según Roberto Baradel. Nada le sale bien al macrismo.
Nubarrones de silencio se extienden sobre todas las noticias gremiales. La capacidad de los propietarios de diarios que encabezan grupos mediáticos que abarcan todo tipo de soportes (redes, TV, radio) se ve ahora aumentada por ola de censura de los medios oficiales. Los trabajadores de la Televisión Pública denunciaron actos sistemáticos de censura a cargo de “comisarios políticos” nombrados fuera de toda legalidad. El hecho se conoció en un video donde señalan que “desde la dictadura cívico-militar nunca una gerencia pidió sanciones, ni exigió descargos por escrito por motivos profesionales que atentan a la libertad de expresión”. Otras denuncias vienen realizando los empleados de Télam. Ellos consiguieron esta semana una gran victoria contra el plan de manipulación judicial de Hernán Lombardi y el gobierno al conocerse que las cautelares sobre despidos se mantendrán en la sala V. En Radio Nacional, la intimidación estuvo a cargo de la directora de Recursos Humanos, Marisa Piñeiro, quien junto a Stella Rugna de la oficina de Personal y una escribana realizaron recorridos para certificar quiénes se suman al paro ante la decisión patronal de abonar un aumento del 15% frente a una inflación del 50%. Los sonidos del silencio se hacen ensordecedores. Pequeñas redes de WhatsApp o Twitter, sitios web o escasos programas de TV propalan escasas notas (como este modesto aporte) y hacen un ruido infernal transmitiendo amplificadas las necesidades de los trabajadores, sus reclamos y sus métodos de lucha. Frente a tanta manipulación mediática viene inmediatamente a la memoria las eternas palabras del más grande periodista de los trabajadores.
«Reproduzca esta información, hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a mimeógrafo, oralmente. Mande copia a sus amigos; nueve de cada diez las estarán esperando. Millones quieren ser informados. El Terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad». (Rodolfo Walsh.)
--------------------------------
Para suscribirte con $ 1000/mes al Cohete hace click aquí
Para suscribirte con $ 2500/mes al Cohete hace click aquí
Para suscribirte con $ 5000/mes al Cohete hace click aquí