El gran hermano tiene que pagar

La Cámara Civil condenó a Gabriel Levinas a pagar 88.000 dólares a la familia de León Ferrari

 

La Justicia condenó al mediático Gabriel Isaías Levinas a restituir 88.000 dólares a la familia del fallecido artista plástico León Ferrari, por la sustracción original de 15 cuadros que no fueron restituidos a sus deudos ni abonados. El fallo de la Sala A de la Cámara Civil, caratulado como Ferrari, María Alicia y otro c/ Levinas, Gabriel Isaías s/ Rendición de Cuentas, firmado por los jueces Ricardo Li Rosi y, justicia poética mediante, Sebastián Picasso, no fue hecho público por el Centro de Información Judicial (CIJ) debido a presiones ejercidas sobre los funcionarios responsables para que no posteasen los dictámenes en las redes.

El ex panelista de Gran Hermano y PPT recibió en préstamo 15 cuadros de manos de Ferrari en 2008, con el compromiso de exponerlos en la Galería de Arte Brun Leglis  de París. Sin embargo, de las quince obras entregadas a Levinas por Ferrari, aquél restituyó cuatro y retuvo las once restantes.

 

 

Tras la muerte del artista, el 25 de julio de 2013, la viuda y el hijo de Ferrari reclamaron  la devolución de la totalidad de los cuadros. La Justicia Civil, en primera instancia, y luego la cámara respectiva, condenaron al panelista a pagar 88.000 dólares (11.000 por cada obra) y su actualización a valores actuales.

La defensa de Levinas fue leguleya: reconoció los hechos, pero arguyó que esos cuadros no figuraban en el acervo hereditario de la sucesión de Ferrari. La Sala A de la Cámara Civil rechazó ese argumento: "No cabe duda de que el hecho de no haber denunciado en el marco del juicio sucesorio los bienes que en este proceso se reclaman no es óbice para promover la acción aquí intentada". Interrogado sobre el fallo, que lleva número de expediente 78500/2015, Levinas pretendió invisibilizarlo, aduciendo que continuaba en trámite debido a “la diferencia en los montos”, lo cual no era cierto.

 

León y Alicia.

 

En la primera etapa de la demanda, Levinas adujo que vendió parte de la obra de Ferrari,  en Uruguay, en negro a un comprador del cual sólo recordó el apellido Brumberg. Agregó que Brumberg le quedó debiendo “una cuota”, pero que no pudo devolver el dinero a Ferrari “porque debió usarlo por razones de urgencia”.

 

SENTENCIA-CÁMARA-condena-a-rendir-cuentas

 

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