Homero y Virgilio

La música que escuché mientras escribía

La semana pasada publicamos la entrevista que le hice a Pichuco en 1965 y escuchamos muchos de sus tangos, entre llos Responso, que compuso en memoria de Homero Manzi en 1951 y que desde 1964 no pudo volver a tocar porque lo conmocionaba más de lo que podía sufrir. Por una de esas asociaciones estúpidas que no se si a todos los ocurren, me puse a pensar en el otro Homero del Tango, Expósito. Me da un poco de vergüenza escribir sobre él, después de las notas de Matías Mauricio que ya publicamos en El Cohete.   Esta, de 2019, o esta de 2020  sobre el poema sin rima que le dedicó a Pichuco, o esta, de 2022 sobre sus poemas que fueron inéditos hasta que su compañera se los entregó a Mati, o esta sobre su tango Trenzas.

Vale la pena releerlas y reescucharlas, de modo que cuando los hombres sabios hablan, lo mejor que podemos hacer los ignorantes es callarnos. Pero no por eso debemos privarnos de escuchar  estas joyas de la cultura nacional, que quiero compartir con vos para que nos ilumine este primer domingo de un año que será bravo, pero que tal vez abra una luz de esperanza.

La música de varios de esos tangos fue compuesta por su hermano Virgilio: Naranjo en Flor, Tu casa ya no está. Más de los que yo recordaba eran de Domingo Federico, uno de los hermanos del gran bandoneonista Leopoldo: Al compas del corazón, Tristezas de la calle Corrientes, Yuyo Verde, Percal,  A bailar. Hay varios del Chupita Héctor Stamponi: Flor de Lino, Pedacito de Cielo, Quedémonos aquí. Osmar Maderna compuso Pequeña. Armando Pontier, Trenzas.  Después de escucharlas te surgieron que releas las notas de Mati Mauricio, que es uno de los hallazos del Cohete que más feliz me hace. Stamponi introdujo a los hermanos Expósito en el mundo que giraba en torno de la orquesta de Miguel Caló, donde conoció a Federico, Maderna y Pontier.

Como yapa, un bolero conocido en todo el mundo, tal vez el más granado de la historia, pero que no todos saben que fue compuesto por los hermanos Expósito: Vete de mi. Aquí en la desgarradora versión de Bola de Nieve. Y si tenés tiempo, un corto de 1996 en el que Virgilio, con ese aire a Gene Hackam que le dieron los años, cuenta que Daniel Riolobos llevó el tema en una gira a Cuba, donde se convirtió en una especia de Himno Nacional, Incluye la despedida a Bola de Nicolás Guillén, y fragmentos de las versiones de Riolobos, Roberto Yañez, María Marta Serra Lima y el gran Caetano Veloso. Quienes tuvimos el privilegio de conocer y escuchar a Virgilio, su versión de Naranjo en Flor nos preguntábamos cómo pudieron producir esa maravilla, el pibe de 15 años que tocaba el piano y su hermano de 19 o 20 que escribía la letra. La poesía es un misterio. También tenían 19 años Rimbaud cuando publicó su Temporada en el Infierno y Javier Heraud cuando murió cruzando el río Madre de Dios en la guerrilla peruana.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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