Un duro suelto

 

El hotel Howard Johnson de Pergamino festejó sus diez años el jueves 26 de septiembre. En la ceremonia estuvo el presidente de la cadena hotelera, Alberto Albamonte, e invitados como el secretario de Turismo, Daniel Scioli, y el diputado nacional José Luis Espert, oriundo de la ciudad.

 

 

Espert se mostró duro y a la vez suelto de lengua. Su relación con Fred Machado, el empresario acusado y detenido por tráfico y lavado, que le facilitó un avión y una camioneta para su campaña, fue revelada por el periodista Rodis Recalten la revista Noticias el 8 de agosto de 2019. Lo que se desconoce es su relación con las sustancias, dado su comportamiento.

En pleno festejo aceptó realizar una nota para la FM 99.5 de la ciudad repetidora de Cadena 3. Lo hizo después de observar la credencial de María Cecilia Lovizio. Sin música en el ambiente, comenzó a realizar un ridículo movimiento, como si estuviera bailando. Con su lengua desenfrenada, Espert se auto-presentó. La movilera le contó que fue maestra y directora y él arremetió: “¡Me hubiera gustado que me enseñes a mí!”, boqueando a su interlocutora.

La conversación continuó sobre su formación en el colegio San José Hermanos Maristas de Pergamino. Sus recuerdos borrosos lo hicieron dudar si fue un colegio de curas o si también tuvo docentes “civiles”. Lovizio le contó que cumplirá 100 años el colegio. Espert dijo que asistirá a la fiesta y luego reparó en que primero debía ser invitado. Confesó que no fue de los mejores alumnos.

“José Luis, ¿qué más recordás de Pergamino, de tu época de niño, de joven?”, preguntó la movilera. “Un montón de cosas te puedo contar”, respondió Espert. “Te puedo contar que armaba karting a rulemanes y corríamos carreras con los salvajes de mi cuadra”, expresó, mientras realizaba dos movimientos ligeros con su nariz.

Con su mano derecha en el bolsillo del pantalón y la izquierda inquieta, se toca su cintura hasta llegar a su cuello. “También te puedo decir que tuve un par de veces entrada a la comisaría porque mandé a un tipo al hospital”, expresa. De inmediato se arrepiente, dice “no” haciendo muecas.

La movilera repara: “No, no, vamos hablar en serio”. Espert, sin dejar de tocarse, dice: “Tuve muchas novias en Pergamino. Las chicas de Pergamino eran muy lindas en mi época. Y como yo no tenía vergüenza me encaraba a todas y rebotaba como pelota de trapo, pero alguna cayó”.

La notera le recuerda que en esa época tenía pelos. Espert, moviendo su cabeza y con aire de galán, expresa: “Ese pelo como el león”. Y añade, “como el león de Javier Milei, tenía el pelo”. Luego hablan de sus estudios y sugiere que se quedó sin pelo de tanto estudiar. Menciona que tiene cuatro títulos.

La conversación siempre banal se interrumpe porque Espert abandona la nota, abraza a otros. Se lo ve eufórico y cuando vuelve confiesa el amor hacia su mujer: “Amo a mi esposa María Mercedes González, la amo”, dice mientras mira a la movilera. “No, vamos a hablar en serio”, le dice Lovizio, intentando ubicarlo. “Me gusta mucho el sexo con ella”, sigue Espert y mira nuevamente a la periodista. Lovizio mantiene la compostura y expresa: “Y sí, está muy bien”. “Me gustas Mechi, te deseo Mechi”, dice luego Espert, como apoda a su mujer. Su mirada, sus movimientos, sus palabras, lo exponen en un estado fuera de lo normal.

–¿Me dijeron que vos querés ser el próximo gobernador? –preguntó Lovizio.

–No sé, no sé, eso lo decidirá el Presidente. Donde el Presidente crea (con evidente palatización en su pronunciación) que yo soy más útil, ahí astaré (sic).

Fue una de las colaboradoras del diputado quien se ofreció a filmar la nota donde lució eufórico, con altos y bajos, por momentos realizando movimientos ligeros con su nariz. Espert quiere volver a revalidar su banca “para sacar al kirchnerismo, que ha hambreado a la provincia durante tantos años”.

 

 

 

 

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